La vida en rosa

Esta semana, hemos empezado a pensar en color rosa la llegada de Clarita. La vemos cada día más cerca. Desde ya la oímos, la vemos y la soñamos.

El embarazo avanza muy bien gracias a Dios. La última "ecografía" salió muy bien y parece que nuestra pequeña quiere llegar pronto a casa.

Tendremos nuestra visita familiar el día 4 de agosto. Desde ya hemos empezado a invitarlos a todos. Como la vez pasada, es el momento en el que la familia en pleno y los amigos del alma expresarán cuánto comparten con nosotros tres nuestro proyecto de vida.

Luego, si las cosas salen bien, vendrán un par de talleres y entraremos al comité del Bienestar en el que empezarán a ver en qué momento nuestras vidas se encuentran con la de Clarita, en qué momento Dios decidirá que una pequeñita estará con nosotros para querernos más.

Estamos muy felices. Aunque pareciera que vamos lento, el tiempo -como en todos los embarazos-pasa pronto. Nada ha resultado fácil y no tenemos ventajas. Seremos padres de una personita distinta, con su identidad propia, diferente a su hermanito, pero especial como él. Eso nos hace felices.

Por ahora, seguimos en nuestro trasteo. La casita ha empezado a sufrir serias pero lindas transformaciones. Ya la verán.

Encomienden mucho este embarazo, requiere de muchos cuidados, como la mayoría; pero como todos, ensancha el corazón y llena el alma de amor cada día.